SIGNOS VITALES LE Verónica Tarelo Acuña SNTSA 37 14 febrero 2022
Los signos vitales y la toma correcta de ellos, es la guía o pauta para observar el estado de una persona ya sea en estado crítico, patológico o normal y observar la evolución, varían de acuerdo a: Genero, Edad, Actividad Física, Peso, Enfermedad, si bien constituyen las principales señales de vida de ahí su nombre; del sistema respiratorio (respiración) del sistema cardiovascular (pulso y presión arterial) del termostato endógeno (temperatura).
PRESION ARTERIAL.
Este signo refleja la fuerza de la sangre dentro de las paredes de las arterias, tiene dos limites, uno superior llamado presión arterial sistólica cuyo valor normal es de 90 a 140. que depende del volumen de sangre en el corazón expulsado con cada latido y la presión arterial diastólica valor normal 60 a 90 hg. que depende la resistencia de la pared de las arterias, cuando la presión se encuentra por encima del valor normal se denomina hipertensión, mientras que cuando se ubica por debajo corresponde a la hipotensión.
TOMA DE LA PRESION ARTERIAL.
El paciente debe de estar relajado (sin actividad física por lo menos 30 minutos antes de la medición) reposo por lo menos 5 minutos antes de la toma.
No cruzar las piernas.
Tener la vejiga vacía. Pies apoyados cómodamente sobre el suelo. El esfigmomanómetro manual y el manómetro de mercurio o aneroide debieron ser calibrados en los últimos seis meses
- Medir la presión arterial en un lugar tranquilo y libre de ruidos.
.- El paciente debe de estar sentado con la espalda recta. - No conversar.
- Apoyar el brazo a la altura del corazón, descubierto. Usar el tamaño del manguito adecuado, esta debe envolver el brazo y cerrarse con facilidad un mango pequeño agrega de 2 a 8 mm hg. – Colocar el manguito en el brazo, Dejar libre la fosa ante cubital colocar el borde inferior del brazalete 2 a 3 cm por encima del pliegue del codo agregar hasta 5. 50 mm Hg. Palpar la arteria braquial.
Colocar la campana del estetoscopio en el nivel de la arteria braquial. El centro de la cámara debe coincidir con la arteria braquial. El manguito debe quedar a la altura del corazón. Establecer la presión arterial sistólica por palpación de la arterial braquial/radial, e inflar el manguito para determinar por palpación el nivel de la presión sistólica. Insuflar rápidamente el manguito hasta 30 o 40 mmHg por arriba del nivel palpatorio de la presión sistólica para iniciar su auscultación. Desinflar a una velocidad de 2 a 3 mmHg/segundo.
Usar el primer ruido de Korotkoff para identificar la cifra de PAS y el quinto ruido (desaparición) para la cifra de presión arterial diastólica (PAD). Ajustar las cifras auscultadas a números pares. En caso de que se continúen auscultando ruidos hasta un nivel muy cercano al cero, entonces se deberá tomar el cuarto ruido de Korotkoff (apagamiento) para determinar la cifra de PAD. Por último, es necesario realizar como mínimo dos mediciones separadas al menos por un minuto; si se detecta una diferencia de presión arterial (PA) entre ambas, mayor de 5 mmHg, deberá realizarse una tercera toma. Es importante esperar al menos un minuto entre las mediciones, ya que, si el sistema venoso se llena, será difícil la auscultación de los ruidos. CIFRAS NORMALES. La presión arterial promedio en un recién nacido es 64/41. La presión arterial promedio en un niño de 1 mes a 2 años es 95/58. En niños de hasta 5 años, la presión arterial normal oscila alrededor de los 110 en sistólica y los 73 en diastólica, mientras que en niños de hasta 12 años, los valores que no presentan riesgos están entre los 122 en sistólica y 77 en diastólica. En adolescentes, la presión sistólica ha de estar entre 120 y 105, y la presión diastólica entre 80 y 73. Por otro lado, en lo jóvenes y adultos de hasta 34 años, los valores considerados como correctos están en la presión sistólica entre 110 y 134, y en la diastólica entre 85 y 77. En adultos de hasta 30 años los valores oscilan entre 118 y 144 en el caso de la sistólica, y entre 90 y 82 en la diastólica. Por último, el grupo más vulnerable a sufrir las consecuencias de una tensión arterial inusual son los individuos de edades avanzadas, por eso se les recomienda un control más exhaustivo: sus valores han de estar entre 147 y 121 para la sistólica, y 83 y 91 para la diastólica